A unos cuantos kilómetros del municipio de Chocholá se encuentra un tesoro esperando ser descubierto, el yacimiento arqueológico de Oxkintok, que guarda los vestigios de la antigua ciudad que llegó a ser uno de los centros neurálgicos del periodo Clásico Temprano. Su nombre significa “tres días pedernal” o “tres soles cortantes” y es la zona arqueológica más occidental de la ruta Puuc y también el más antiguo y misterioso. En este sitio, muy poco visitado pese a ser uno de los asentamientos mayas más importantes de Yucatán y con un periodo de ocupación muy largo, es posible admirar inscripciones calendáricas, hermosas columnas de piedra antropomorfas, estelas, pirámides, uno de los juegos de pelota más antiguos registrados, un laberinto en el que da miedo perderse y una puerta secreta al inframundo.
La ciudad llegó a ser un punto crucial en las rutas comerciales entre la Península de Yucatán y otras regiones como el Golfo de México y el Altiplano Central. Su monumental estilo arquitectónico, sus numerosas esculturas y sus tumbas reales reflejan los profundos conocimientos de los mayas en métodos de construcción.
De acuerdo con los hallazgos arqueológicos, la ciudad fue habitada durante un largo periodo, que abarca desde el Preclásico Superior (300 a.C. – 300 d.C.) hasta el Posclásico Tardío (1250-1500 d.C.), y llegó a ser una gran capital durante el periodo Clásico Tardío, hasta que el centro de poder se trasladó a Uxmal, a sólo 24 kilómetros de distancia. Entre los hallazgos más notables del sitio destacan las estelas distribuidas en todo lo largo y ancho, la evidencia de estructuras como cuevas y cisternas; tres entierros humanos de un individuo adulto, un infante probablemente de sexo femenino, y una mujer de entre 20 y 25 años, junto a la cual se encontró una ofrenda en una vasija de estilo Muná. Sin duda, el hallazgo más destacado es una escultura antropomorfa de piedra caliza, de 1.35 de altura y 150 kilogramos de peso, que representa la figura de un hombre y un órgano sexual, que se cree que está asociada a la fertilidad humana y agrícola.
Gracias al Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas, ésta y otras antiguas ciudades prehispánicas están siendo estudiadas y dadas a conocer. Oxkintok es sin duda un lugar listo para revelar su belleza y esplendor a todos los visitantes que decidan adentrarse en sus secretos.
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